Había un cuidador Pokémon muy feliz que pasaba días y noches atendiendo a sus Pokémon. Se encariñó con un débil Marowak, pero cuando rescató a un Charmander malherido, Marowak se sintió rechazado y lo enfrentó. El cuidador lo salvó, pero Marowak huyó. Años después, el cuidador leyó sobre un Marowak causando temor y corrió a encontrarlo. Marowak llegó agotado, el cuidador lo ayudó, pero la policía los arrestó.

Marowak escapó, rescató al cuidador con dos amigos y se escondieron. Desde entonces, la región cambió, los gobernantes también, y la historia del cuidador y sus Pokémon quedó en el misterio. ¿A donde te llevara esta premisa? No dejes de jugar Pokémon Crush.